Um "perigosa" suspeita de ser terrorista

Um "perigosa" suspeita de ser terrorista
Menina de 6 anos no index dos EUA

Seleção argentina apoia Avós da Pça. de Mayo para o Nobel da Paz

Seleção argentina apoia Avós da Pça. de Mayo para o Nobel da Paz
Seleção de Maradona é politizada

Matéria paga censurada pelo Financial Times

Matéria paga censurada pelo Financial Times
Grande imprensa britânica não se comporta democraticamente

Barão de Itararé

Barão de Itararé
Pai da imprensa alternativa, um batalhador de causas justas e muito bem humorado

Crianças palestinas acorrentadas

Crianças palestinas acorrentadas
A foto fala por si só

Piñera y al fondo su mentor

Piñera y al fondo su mentor
Será coincidência?

Manchete de jornal venezuelano em 1992

Manchete de jornal venezuelano em 1992
El Nacional informa

Ministro Jobim não se dá ao respeito

Ministro Jobim não se dá ao respeito
Em traje de campanha, Ministro da Defesa se exibe para a mídia

Personagens da época da Guerra Fria

Personagens da época da Guerra Fria
EUA patrocinou o golpe que derrubou Jango

Ingerência da CIA na Colômbia

Ingerência da CIA na Colômbia
Uribe acabou e agora faz falta um outro de melhor aparência

Uribe no fim de linha

Uribe no fim de linha
Presidente colombiano é marionete dos EUA

Coca Colla boliviana

Coca Colla boliviana
Refrigerante competirá com a Coca-Cola na Bolívia

A importância da agroecologia

A importância da agroecologia
Transgêniucos prejudicam a agroecologia

Uma publicação sintonizada no seu tempo

Uma publicação sintonizada no seu tempo
New Left Review

Plataforma Ocean Guardian

Plataforma Ocean Guardian
Objetivo é encontrar um mar de petróleo nas Malvinas

Cutrale a, a multinacional que tudo pode

Cutrale a, a multinacional que tudo pode
Alerta de Latuff

Uma visão sobre a impunidade

Uma visão sobre a impunidade
O desejo de muitos brasileiros

Mais arte popular desconhecida do Haiti

Mais arte popular desconhecida do Haiti
Visão de mulheres trabalhadoras haitianas

A pouco conhecida arte do Haiti

A pouco conhecida arte do Haiti
As riquezas da cultura do Haiti

General Lazaro Cardenas y Fidel em 1959

General Lazaro Cardenas y Fidel em 1959

america latina

america latina

a gente não se despede de mario benedetti

a gente não se despede de mario benedetti
um escritor imortal

boris casoy

boris casoy
boris para o lixo

sábado, 19 de dezembro de 2009

Carta Abierta de Michael Moore a Barack Obama

Documentarista comenta lo que pasa en Afeganistán


mapamundi

viernes, 18 de diciembre de 2009


Salió en Brecha y en La Jornada de Mexico


Estimado presidente Obama:

¿De veras usted quiere ser el nuevo “presidente de guerra”? Si va a West Point mañana en la noche (martes, 20 horas) y anuncia que, lejos de retirarse, aumentará el número de tropas en Afganistán, entonces será el nuevo presidente de guerra. Así de simple. Y así hará lo peor que puede hacer –destruir los sueños y esperanzas que muchos millones de personas han depositado en su persona–. Con el discurso de mañana podría convertir a una multitud de jóvenes que fueron los pilares de su campaña en cínicos desilusionados.

Les enseñará que es cierto todo lo que han escuchado siempre –todos los políticos son iguales–. Sinceramente, no puedo creer que esté a punto de hacer lo que dicen que hará. Por favor, diga que no es cierto.

Su trabajo no es hacer lo que los generales le dicten. Somos un gobierno civilizado, nosotros le decimos al Estado Mayor qué hacer, no al revés. Según el general Washington, así es como debe ser. Eso fue lo que el presidente Truman le ordenó al general MacArthur cuando éste quiso invadir China. “¡Está despedido!”, dijo Truman. Y usted debería haber despedido al general McChrystal cuando éste se dirigió a la prensa para decir lo que usted debía hacer. Permítame ser claro: amamos a nuestros hijos en las fuerzas armadas, pero odiamos a estos generales, desde Westmoreland en Vietnam hasta... el mismísimo Colin Powell, por mentir a la onu con sus elaborados dibujos de armas de destrucción masiva (desde entonces ha buscado la redención).

Por tanto, ahora se siente acorralado en una esquina. Hace 30 años, en el Día de Acción de Gracias, los generales soviéticos tuvieron una genial idea: “Vamos a invadir Afganistán”. Bueno, ese resultó ser el último clavo en el ataúd de la urss.

Hay una razón por la que ellos no llaman a Afganistán el “Estado jardín” (aunque probablemente deberían, al ver cómo el corrupto presidente Karzai, a quien apoyamos, tiene un hermano en el tráfico de heroína). Afganistán es conocido como el “cementerio de los imperios”. Si no lo cree, llame a los británicos. Le diría que llamara a Gengis Kan pero perdí su número. Por cierto, tengo el número de Gorbachov: es +41 22 789 1662 . Estoy seguro de que él podría darle una reprimenda por el error histórico que está a punto de cometer.

Con nuestro colapso económico en pleno apogeo y nuestros preciados jóvenes siendo sacrificados en el altar de la arrogancia y la codicia, la ruptura de esta gran civilización que llamamos América nos conducirá aceleradamente al olvido si usted se convierte en el presidente de guerra. Los imperios nunca piensan que el fin está cerca, hasta que lo tienen delante. Ellos piensan que una mayor maldad obligaría a los paganos a actuar según las normas –y eso nunca funciona.

Elija con cuidado, presidente Obama. Usted sabe que no tiene que ser así. Aún restan unas horas para que escuche a su corazón. Es pensar con claridad. Usted sabe que nada bueno resultará de enviar más tropas al otro lado del mundo, a un lugar que ni los generales ni usted entienden, a un país que no nos quiere allí. Usted puede sentirlo en sus huesos.

Yo sé que usted sabe que quedan ¡menos de un centenar de miembros de Al Qaeda en Afganistán! ¿Cientos de miles de tropas para aplastar a unos cientos de chicos que viven en cuevas? ¿Es en serio? ¿Cree en las mentiras de Bush? Me niego a creerlo.

Su potencial decisión de expandir la guerra (si dice que puede hacerlo también puede “terminar esa guerra”) va a hacer más para estampar su legado para siempre que cualquiera de las cosas que haya dicho o hecho en su primer año. Una piedra más que usted lance por los republicanos, y la coalición de la esperanza y la desesperanza podría desaparecer, y esta nación estaría nuevamente en manos de los que odian más rápido de lo que usted tarda en gritar “bolsita de té”.

Elija con cuidado, señor presidente. Sus patrocinadores corporativos lo abandonarán tan pronto concluya su mandato, y la nación volverá a estar en las seguras manos de los mismos idiotas que cumplen órdenes. Eso puede ser el miércoles en la mañana.

El pueblo aún lo quiere. El pueblo aún tiene un rayo de esperanza. Pero el pueblo no va a aguantar más. No podemos hacernos responsables de su derrumbe, una y otra vez, cuando lo elegimos por un amplio margen para hacer el trabajo bien hecho. ¿Qué parte de la victoria arrolladora es la que no entiende?

No se deje engañar al pensar que el envío de más tropas a Afganistán hará la diferencia, o le ayudará a alcanzar el respeto de los que odian. Ellos no pararán hasta que este país esté hecho pedazos y cada dólar les sea sustraído a los pobres o a aquellos que pronto lo serán. Usted podría enviar millones de soldados allá y la desenfrenada derecha seguiría inconforme. Usted sería incluso víctima de su incesante veneno presente en la radio y la televisión, porque no importa lo que haga, no puede cambiar la única cosa sobre su persona que los envía al borde.

Los que odian no fueron quienes lo eligieron, y no podrá conquistarlos por el hecho de abandonarnos.

Presidente Obama, es tiempo de regresar a casa. Pregúnteles a sus vecinos en Chicago y a los padres de los jóvenes que combaten y mueren si desean más miles de millones de dólares y más tropas destinadas a Afganistán. ¿Qué cree que van a decir? ¿“No, no necesitamos atención de salud, no necesitamos trabajo, no necesitamos hogares. Siga adelante, señor presidente, y envíe nuestras riquezas y nuestros hijos e hijas al extranjero, no los necesitamos tampoco”?

¿Qué haría Martin Luther King Jr? ¿Qué haría su abuela? No enviar más pobres a asesinar a otros pobres que no representan ninguna amenaza, eso es lo que harían. No gastar miles de millones de dólares para sufragar guerras cuando hay niños durmiendo en las calles y en las colas para el pan.

Todos los que votamos y rezamos por usted y lloramos en la noche de su victoria hemos soportado un infierno de ocho años de crímenes cometidos en nuestro nombre: torturas, capitulación, suspensión de los derechos, invasión a naciones que no nos han atacado, desaparición de vecindarios donde Saddam “supuestamente” estaba (pero nunca estuvo), y masacres en bodas afganas. Observamos cómo cientos de miles de civiles iraquíes fueron masacrados y decenas de miles de nuestros valientes soldados han sido asesinados, mutilados, o han sufrido angustia mental, un terror que apenas se conoce.

Cuando lo elegimos no esperábamos milagros. Ni siquiera esperábamos muchos cambios. Pero esperábamos algunos. Pensamos que iba a detener la locura, la matanza. Detener la irracional idea de que hombres con armas pueden reorganizar una nación que jamás ha funcionado como nación.

¡Deténgase! Por el bien de la vida de los jóvenes estadounidenses y los civiles afganos.

¡Deténgase! Por el bien de su presidencia, esperanza, y el futuro de nuestra nación. Por el amor de Dios, por favor, ¡deténgase!

(Fragmentos de una carta dirigida por el cineasta antes de que Obama anunciara el envío de más de 30 mil soldados estadounidenses a Afganistán, lo cual esta semana comenzó a implementarse.).

Nenhum comentário:

Postar um comentário